lunes, 24 de agosto de 2009

Las variantes de Pellegrini

El Madrid marca los tiempos de manera correcta, consciente de la realidad. Ellos están creando algo que el Barça ya tiene. Un equipo. La ventaja blaugrana es clara, equipo ganadar, dinámica positiva estilo selección española en la eurocopa, entrenador de máximo nivel que cuenta con el respaldo y el respeto de todos y unos jugadores acordes al modelo de juego del equipo. Mientras Xavi o Iniesta estén en el campo, lo demás es 'casi' prescindible porque el Barça defiende y ataca con todos, es un conjunto que funciona porque los jugadores conocen su misión. Llegados a la frontal, no es lo mismo Ibrahimovic que Bojan, Messi que Pedrito, pero con los cuatro llegarás a zona de finalización y ese es el mérito de un equipo que demuestra mucha calidad de entrenamiento específico. Primero orden, porque si no robas el balón no juegas. A partir de ahí fluidez y finalización. El Barça de Guardiola no se salta ningún paso, va poco a poco, sin prisa pero sin pausa a una velocidad de vértigo. Nadie está a salvo de la derrota, un mal día es un título perdido pero la sensación es que solo un cúmulo de circunstancias desastrosas y casuales puede torcer el camino de un equipo que va imparable hacia la historia.

Queda saber quien es Guardiola. Sobresaliente en todo hasta ahora, aun no se ha examinado en algunas asignaturas. Veremos como responde cuando lleguen tres derrotas seguidas, un bache, una eliminación importante, un affair con un jugador estrella durante temporada, un aluvión de críticas por su toma de decisión, una derrota contra el Madrid que te deja KO en liga... Quedan muchas cosas, un entrenador nunca deja de aprender, la experiencia es oro y tiene que seguir recorriendo su camino. Tiene inteligencia para ser un hombre referencia en el club pero lo que hoy es blanco, mañana es negro.

El Madrid es la gestión del talonario. Busca un equipo "All star" dirigido por un entrenador que destaca en la gestión de plantilla y que no le tiembla el pulso como demostró en el 'tema Riquelme'. El "nosotros" por encima del "yo", rotaciones constantes, nadie es imprescindible y la unión hace la fuerza. Su misión no es fácil, pero es el hombre adecuado. Tiene un buen equipo, el clan de los holandeses se está haciendo cero y los jugadores están implicados. La calidad humana es importante y hablamos de jugadores jovenes, con ganas de triunfar y que saben manejar la presión y el saber estar. Casillas, Alonso, Kaká, Raúl, Higuain, Gago, Lass, Granero, Arbeloa, Van Nistelrooy o Pepe son sinónimo de sentido común, calidad, profesionalidad y comunicación en el día a día. Ya hay jugadores españoles y acostumbrados a la selección, la españolización en sí no me dice nada, pero son jugadores de mando, referencias, hablar el mismo idioma en un vestuario así como la comunicación con el entrenador es siempre importante.

A partir de ahí, Pellegrini debe buscar el equilibrio, un equipo que juegue y gane. La referencia es el Villareal, pero el chileno ha cambiado de librillo, su objetivo es presión arriba, provocar el fallo y finalizar rápido. Cuando no se pueda, transición defensa-ataque lenta, dominio de la posesión con Alonso y Kaká claves en el juego y Ronaldo y Benzema en la finalización. El modelo de juego está claro, se busca ser equipo referencia, tener el dominio y aplastar al rival. El objetivo algo semejante al mejor Barça de Rikjaard, con muchos jugadores en campo contrarios, dueños del juego posicional y mucho movimiento en ataque. Los jugadores harán el sistema y la correcta elección así como la gestión de la plantilla teniendo control sobre las estrellas y sabiendo dar privilegios a los cracks sin que el grupo se resienta, serán dos de las cosas que marquen el futuro del Madrid.

El primer objetivo del que busca alimentar la polémica es Raúl. Raúl sí o Raúl no cuando la respuesta es mucho más sencilla si nos centramos en temas exclusivamente deportivos. Raúl en un equipo de contragolpe, que busca el repliegue y la velocidad arriba es un jugador entre mil, lejos de dar rendimiento porque no tiene desborde, le falta velocidad y su fiabilidad en el mano a mano ha ido bajando hasta la desconfianza. Su desmarque rompe, pero ahora necesita dos o tres segundos de más que el defensa y el fuero de juego es un habitual. Antes, cuando solo necesitaba esa décima de segundo, Raúl era letal.
En el 4-3-3 más de lo mismo. En banda puede sacar partido de la diagonal de fuera a dentro desde el lado débil porque si en algo ha crecido Raúl es en el remate de cabeza. Pero dos cosas lo imposibilitan en banda, primero que el Madrid no tiene un centrador de calidad por banda izquierda y que su peso en el equipo es tan importante que su autogestión durante el partido lo lleva al centro, ocupa el espacio del punta, se forma embudo y aunque él saque rendimiento porque en espacios cortos y cerca del área es sinónimo de gol, el equipo se resiente y el juego pierde fluidez y orden. Arriba Raúl ya no es lo que era. Un jugador sin regate, velocidad, sin definición diferencial y tan dependiente del juego del equipo es un jugador demasiado imprevisible en el gol. Puede marcar un doblete y luego estar dos meses de sequía. No tiene contragolpe para jugar con equipo replegado ni giro de tobillo explosivo para jugar con el equipo cerca del área y rival replegado. Además Raúl es llegar, no estar. Buscar el sitio vacio por sorpresa, con mirada panorámica, ser la referencia es restar en su juego.

Es evidente que Raúl está lento, lento en sus movimientos y lento en carrera, pero también que es un jugador único. Su sitio está en el 4-4-2 con otro punta, sin tener que ser la referencia, tapando la salida con el mediocentro cuando tenga el balón el rival y llegando al punto de penalti. En un equipo ofensivo, que llega con muchos jugadores y está cerca del área Raúl es gol de corner, gol de cabeza, gol en rechace, mano a mano tras desmarque.... juego poco plástico de cara a la galeria pero mucho gol.

Con Raúl y Benzema el equipo carece de jugador referencia en ataque, nadie fija a la defensa, pierdes metros y por tanto el dominio. La calidad sobra y puedes ganar por arreones, el rival deja espacio y Ronaldo es letal en el desmarque de ruptura por detrás de la defensa, pero el juego se vuelve tosco, el rival se mete en el partido y se pierde la claridad. Negredo-Benzema hubiera sido otro cantar, con el canterano jugando de killer y Benzema buscando el espacio libre y bajando a recibir. Van Nistelrooy es otra posibilidad para esa posición, su edad y la duración de su lesión hacen crecer las sospechas, pero la realidad es que el "killer" holandés siempre marcó goles en sus reapariciones tanto de blanco como en el Manchester de Ferguson o el PSV holandés.

Un 4-2-4 vale para la Liga española, equipo roto pero calidad diferencial inasumible para el rival. Lass y Alonso en el centro y arriba Ronaldo y Kaká de fuera hacia dentro y Benzema con Raúl. En Europa, con ese equipo el dominio es del rival y no tienes variantes por Kaká no puede jugar de "8", Alonso pierde enteros como único mediocentro y el 4-3-3 sobre la marcha entonces no funciona porque Raúl, Kaká, Alonso y Benzema pierden rendimiento. La otra opción es Robben entra por un punta y juegas con 4-2-3-1, dos puñales en banda, Kaká arrancando desde el centro, Alonso y Lass en su habitat. Seguramente entonces Villa era el hombre para jugar de único punta y no el francés Benzema, aun así, de partida, parece el once mágico. El problema llega en la segunda parte, minuto 60' con resultado de empate o inferioridad, no tienes a nadie que mejore lo que haya y los cambios tácticos rompen al equipo, seguramente el "pipita" por Alonso sea lo más coherente, pero no parece fácil. Los partidos los ganan 14, mejor salir con Granero de partida y si el partido se tuerce o necesita una marcha más, entra Robben de jugador numero 12 y Granero pasa al mediocentro con Lass o es el sustituido.

Otra opción que ya contempla Pellegrini es el 4-4-2 en rombo a imagen y semejanza del gran Milán de Ancelotti con Alonso haciendo de Pirlo, Granero de Seedorf, Lass de Gatusso, Kaká de mediapunta creando superioridades ofensivas por el pasillo central junto a Ronaldo y Benzema. El chileno no cuenta con Marcelo y le gusta Arbeloa de lateral derecho lo que hace que desista en la idea. Sin carrileros largos, no hay rombo cerrado que valga porque ni tienes grandes rematadores de cabeza a excepción de Cristiano, ni tienes dominio de la segunda jugada ofensiva con Kaká, ni de la defensiva con Alonso ni el efecto sorpresa del lateral subiendo la banda sin marca, ocupando el espacio vacio y con tiempo para controlar, mirar y centrar. Marcelo y Drenthe restan más que suman por banda izquierda y hay dudas con Ramos, que podria ser la pareja en el centro de la defensa de Pepe y que a buen seguro empezará ahí la temporada por la sanción del portugués ya que no ha realizado la pretemporada, su vida no es la de un futbolista de élite y la lesión hace que no haya tenido tiempo para primero desconectar y luego ponerse a punto. El lateral al cien por cien es un jugador crack en su posición, insistente, con calidad, carácter y marcando diferencias en estrategia. Si el físico no le acompaña, es fácil de pasar en el uno para uno, su posición es un espacio libre en la transición ataque-defensa, su calidad técnica disminuye porque llega sin tiempo a la jugada, sus fallos de concentración aumentan por la desmotivación y ya ha fracasado jugando con toda la banda para él, sin un exterior que le ayude en el dos contra uno rival. El Madrid tiene dos opciones con Ramos. O reconvertir a central en dos o tres años o buscar la venta en máximos después de esta temporada siendo indiscutible en el lateral derecho. Saber vender en el fútbol es lo más difícil para una secretaría técnica. Un día un jugador vale 100 millones y no se aceptan ofertas y una temporada después lo tienes que 'colocar' en cualquier equipo por un precio de 20 millones. Un jugador joven, cuya mayor virtud es el físico y que ha empezado antes de los 18 años es un jugador que a los 26 va a tener la primera curva negativa de rendimiento, si además ese jugador no tiene una vida acorde a sus necesidades profesionales, el bajón será anterior y entonces es imposible vender a un precio digno. Tienes a un jugador de calidad, carácter y con años por delante al que no le vas a sacar ningún rendimiento. Hay que vender en máximos o reconvertirlo en central y entonces motivado puede ser jugador de garantías hasta pasada la treintena y uno de los capitanes del equipo. Español, implicado, muchos años en el club y con calidad descomunal, Ramos podría ser el '4' del Madrid muchos años.

El 4-3-3 es una opción que gusta a Pellegrini pero no casa en la selección de jugadores. Si el tridente ofensivo es Robben, Ronaldo, Benzema, entonces Kaká juega de "8" y Alonso de único mediocentro con Granero de interior junto al crack brasileño. Alonso pierde, Kaká pierde e incluso Benzema pierda. Los beneficiados son Granero, Robben y Ronaldo... los dos primeros no son 'galácticos', los que salen perdiendo más Raúl, sí. Si juegas con Kaká tirado a una banda y Cristiano en la otra con el francés arriba, te falta un jugador en el puesto de interior, un jugador perfil Fabregas que complemente a Granero. Además, Lass y Alonso rinden en doble pivote. Lass también puede jugar de interior pero entonces Xabi pierda capacidad en su juego como único "5". Un trivote con M. Diarrá por detrás de Lass y Granero sería un espectáculo, pero Alonso es indiscutible para Pellegrini.

La temporada está a punto de empezar, el 4-2-3-1 parece la solución más rentable para Alonso, Lass, Kaká, Ronaldo, Granero/Robben y Benzema pero entonces Raúl está fuera del once. Si entra Raúl, vuelve la asimetría o se queda fuera Benzema y las dos opciones son malas. Sin Pepe, la defensa será Arbeloa, Ramos, Albiol y Drenthe o Marcelo, preferiblemente el holandés. Lass y Alonso son indiscutibles, Kaká jugará tirado a la izquierda con Ronaldo de extremo y Benzema y Raúl arriba. Ese es el equipo Pellegrini a día 0. No parece el mejor, habrá rotaciones, Raúl entrará y saldrá, Robben y Granero se jugarán un puesto de jugador "11" siendo el otro el número "12", el Pipita lo tiene difícil al igual que Van Nistelrooy. Quedan muchos cabos por atar, pero la plantilla es buena, tiene calidad y jugadores de garantías en todos los puestos. La idea de Pellegrini es tener a Ramos y Arbeloa por derecha, Metzelder, Albiol, Pepe, Garay y el propio Ramos para dos puestos en el centro de la defensa. En la izquierda Arbeloa será titular y Drenthe y Marcelo son los recambios. Para el puesto de mediocentros, Lass, Alonso, Gago y Diarrá, cuatro jugadores solventes y distintos, Gago un escalón por debajo pero tiene margen de mejora, es profesional, apasionado, trabajador, un jugador que siente el fútbol. Granero, Robben, Ronaldo y Kaká se juegan dos/tres puestos según el sistema y arriba Benzema, Higuain, dos jugadores jovenes, móviles y con gol más Raúl, Van Nistelrooy, dos "killers" que aportan experiencia. Plantilla equilibrada y de calidad. Esos son los hombres de Pellegrini.

El equipo necesita tiempo, estar ajeno a las críticas porque crear desde cero es difícil. Hay que ir creciendo, adaptándose a lo que quiere el entrenador y conocerse como equipo. Hay errores en la planificación, no parece que sepan lo que quieren exactamente más allá de un equipo referencia con grandes jugadores, pero hacer en un año un equipo aspirante a grande es difícil y tiene mérito. Esto está al caer, Barça y Madrid prometen espectáculo este año y ese exceso de liga escocesa puede beneficiar al Barça, siempre enchufado y que va partido a partido. Si el Madrid hace de esta liga una carrera de fondo contra el equipo de Guardiola, sin respetar que cada partido es una batalla distinta en la que hay que correr, jugar y marcar, los puntos se irán, la diferencia es grande pero el Atleti conserva al Kun y Forlán, el Valencia tiene el tridente mágico y un gran entrenador, el Sevilla es capaz de quitar puntos a cualquiera y así muchos más equipos. El objetivo, ser el mismo equipo en casa y fuera. Desprecio los comentarios que parten con la idea de jugar con Alonso de único mediocentro en el Bernabeu y junto a Lass para los partidos de fuera. Eso es de equipo pequeño. El fútbol, durante el finde semana, es once para once, dos porterias, un balón y un terreno de juego siempre de dimensiones parecidas. El objetivo, tener el balón y marcar goles y para ser grande hay que hacerlo partido a partido sin excusas y sea quien sea el rival. Para ser grande, hay que mirar en grande.

Aprovecho este artículo para agradecer a Trouro la oportunidad de trabajar aquí junto a un grupo de gente de una calidad tremenda ya consagrada en el ámbito deportivo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario